Cuando en el campo vemos una seta, aun antes de acercarnos mas, podemos distinguir muchos rasgos y aspectos (forma, color, etc) que nos llevaran al termino de identificar correctamente como poco el género a la que pertenece; ya cuando nos acercamos, la cogemos y la examinamos con mas cuidado, vamos descartando unos rasgos, confirmando otros, hasta llegar a la especie concreta que tenemos en las manos. Pero esto no siempre es así, son muchas las ocasiones en que las dudas nos llevan a comprobar otro dato, la esporada, dato microscópico, solo que en este caso podemos verlo con claridad, al concentrarse miles, cuando no millones de esporas. La esporada es el conjunto de esporas que se desprenden (cuando la seta esta madura) del himenio. El dato que esta concentración de esporas puede darnos, sin usar un microscopio, es básicamente su color, pero no es un dato menor ya que nos revela en muchísimas ocasiones, de que especie, o no, se trata. Muchas veces, este color de la esporada puede apreciarse ya en campo, sin embargo la mayoría de las veces hay que extraer las esporas en casa para confirmar con exactitud su color.
Hay varias maneras de acelerar el proceso natural de las setas para conseguir la esporada, dependiendo de la forma, tamaño, consistencia, etc, de la seta en cuestión.
Explicaremos aquí el método mas fácil para realizar en casa, no sólo para comprobar en ese momento el color de las esporas, sino también para conservarlo y que nos sirva en el futuro, tanto de información como de adorno curioso.
Ya en casa, cortamos el pie por la zona mas próxima al sombrero, y -si sabemos de que color es la espora- colocamos este con el himenio hacia abajo, sobre una cartulina de un color determinado para que la espora destaque, como al principio no sabremos de que color son las esporas de las distintas especies, podemos poner el sombrero sobre papel de periódico, que contenga distintas gamas de colores, después tapamos el sombrero con un vaso, un bol o similar, de forma que cubra toda la seta, lo dejamos al menos durante 24h (esto dependerá de la madurez de la seta) y después, procedemos a quitar el recipiente y a levantar con muchísimo cuidado la seta, tirando recto hacia arriba para que no arrastre sobre las esporas, si todo ha ido bien, comprobaremos que la esporada es, en la forma, una réplica del himenio de la seta, sobre todo si esta tiene laminas, ya sólo nos queda poner el nombre de la seta en cuestión, y plastificar la esporada para conservarla.